viernes, 29 de junio de 2007

Delirios II

He aquí una mezcla extraña de mis palabras con las palabras hecha canción de un gran poeta devenido a músico, aunque el crea lo contrario. Se podría decir que está "Tocado" por las letras, como yo tocada por sus canciones. Aquí va.

"¿Cómo fue que fuiste esta catarata,
de caricias blandas sin dormir?
¿Dónde te enseñaron a incendiar miradas?"
Quiero que un hombre me diga que incendio miradas, pero que me lo diga de verdad! O sea, quiero saber como hizo esa chica que te enamoro para que crees tan perfecta metafora. Es demasiado flashero y dulce al mismo tiempo...

Y sí...
"yo era una limosna triste,
mamarracho a la deriva" ,
a la deriva de los mares que nunca navegué.

"...derrumbo mis rumbos
despeno mis penas
planto cuatro besos en tu nariz
que clase de viento te arrastro a mis manos?
que borracha suerte me convido con vos?"

Mejor tirarle un caño a la soledad. Parece hábil, pero cuando le tomás la marca, no lo es. Es bastante bastante rústica la hija de puta. Te das vuelta y te tiro una patada voladora en la cabeza. Y otra vez a lo mismo... Quedás solo, confundido y con 2 taponazos en la frente. No da.


ESTAS COSAS LE DICEN A UNO: O QUE LA CABEZA LE TRABAJA DEMASIADO RÁPIDO, O QUE SE TIENE QUE IR A DORMIR.

No hay comentarios: